Café frío con menta y limón – Refrescante como una infusión, con el carácter del café

¿Un café frío que parezca un té helado? Esta receta une lo mejor de ambos mundos: el frescor del limón y la menta con el sabor profundo del café. Es muy fácil de preparar y perfecta para quienes quieren una bebida ligera, veraniega y diferente. No se necesita licuadora ni ningún equipo especial.

Ingredientes:

  • 1 taza de café frío (puede ser filtrado, espresso diluido o incluso instantáneo)
  • 2 o 3 hojas de menta fresca
  • 1 rodaja fina de limón
  • Hielo en cubos
  • Endulzante a gusto (opcional)

Preparación:

  1. Colocá hielo en un vaso grande.
  2. Agregá las hojas de menta y la rodaja de limón.
  3. Verté el café frío encima.
  4. Si deseás, endulzá ligeramente con azúcar, miel o algún sirope.
  5. Revolvé suavemente y dejá reposar 1 o 2 minutos para que los sabores se integren.

Tip: Si tenés tiempo, podés “machacar” apenas las hojas de menta antes de agregarlas para liberar más aroma.

Esta bebida es ideal para tardes calurosas o para acompañar comidas livianas.