Una receta simple con un toque gourmet que transforma el desayuno o la merienda en una experiencia reconfortante y deliciosa. El contraste entre el pan dorado, el chocolate fundido y el aroma cítrico de la naranja crea un bocado perfecto para los amantes del cacao.
Ingredientes
- 4 rebanadas gruesas de pan brioche o pan de molde artesanal
- 8 monedas de chocolate amargo (entre 60 % y 75 % de cacao)
- 1 huevo grande
- 1 chorrito de leche entera o vegetal (aprox. 40 ml)
- 1 cucharadita de ralladura de naranja fresca
- 1 cucharadita de esencia de vainilla
- 1 cucharada de manteca para cocinar
- Azúcar común o rubia para espolvorear
- Opcional: más chocolate fundido para servir, cáscara de naranja confitada, nueces picadas
Procedimiento
- Uní dos rebanadas de pan colocando en el centro 4 monedas de chocolate, como si armaras un sándwich. Presioná levemente para sellar.
- En un bowl, batí el huevo con la leche, la ralladura de naranja y la esencia de vainilla.
- Sumergí las “tostadas” de pan en esta mezcla por ambos lados, dejándolas empaparse sin que se rompan.
- Derretí la manteca en una sartén antiadherente a fuego medio.
- Dorá las tostadas de ambos lados. Antes de darlas vuelta, espolvoreá con un poco de azúcar para que se caramelicen.
- Serví calientes. Podés acompañarlas con más chocolate fundido, una cucharadita de mermelada de naranja, o decorarlas con ralladura fresca.
Sugerencias
- Si querés una versión aún más intensa, usá chocolate con ralladura de naranja incorporada o infusioná la leche previamente con cáscara de cítrico.
- Para una presentación más gourmet, servilas cortadas al medio para que el chocolate fluya al abrirlas.