Aunque la AeroPress no puede generar los 9 bares de presión de una máquina de espresso, con una buena receta podés lograr una bebida concentrada, densa, aromática y de cuerpo similar, ideal para tomar sola o como base de un latte o cappuccino.
☕ Objetivo: una bebida corta, intensa y equilibrada
Este “espresso manual” se parece a un ristretto: menos volumen, pero con sabor potente. No tendrá crema auténtica, pero sí cuerpo, dulzor y profundidad.
🛠️ Receta estilo espresso con AeroPress
- Método: tradicional (no invertido)
- Café: 18-20 g (molienda fina, como sal de mesa)
- Agua: 60-70 ml a 90-94 °C
- Filtro: de papel (doble si querés más resistencia)
- Preparación:
- Colocá el café en la cámara.
- Verté toda el agua de una (rápido).
- Remové durante 10 segundos.
- Esperá 20 segundos más.
- Presioná firme y constante durante 30 segundos.
Resultado: una bebida de 50-60 ml con textura espesa, sabor concentrado y final largo.
🔄 Variaciones:
- Más crema: Usá café recién molido y probá con filtro metálico, que deja pasar más aceites.
- Más intensidad: Reducí el agua a 50 ml y aumentá la dosis a 22 g.
- Menos amargor: Bajá un poco la temperatura (85-88 °C) y acortá el tiempo de contacto.
🥛 Para usar como base:
Este estilo espresso funciona muy bien para:
- Lattes (con leche espumada)
- Flat whites
- Macchiatos
- Iced espresso con hielo y un toque de limón
Conclusión: Aunque no reemplaza una máquina profesional, la AeroPress bien usada permite crear versiones expresivas y potentes que te acercan al mundo del espresso sin necesidad de grandes equipos. Es un gran paso para baristas caseros con ganas de experimentar.