En el mundo del café, la denominación de origen (DO) es mucho más que una etiqueta: es una garantía de calidad, identidad geográfica y características sensoriales únicas. Al igual que sucede con el vino o el queso, una DO en café indica que ese producto proviene de una región específica, reconocida por su clima, altitud, suelo y tradiciones que influyen directamente en el sabor del grano.
¿Qué implica una denominación de origen?
Una DO certifica que:
- El café proviene de una región geográfica determinada.
- Las condiciones de cultivo, recolección y procesamiento son típicas y reguladas.
- El grano expresa un perfil sensorial distintivo y repetible gracias al “terroir” de esa zona.
Esto no solo protege la autenticidad del café, sino también a los productores, quienes reciben un mejor valor por ofrecer un producto único, trazable y muchas veces de altísima calidad.
¿Qué regiones tienen denominaciones reconocidas en café?
Algunos ejemplos destacados son:
- Café de Colombia: una de las DO más famosas y legalmente protegidas. Los granos colombianos son conocidos por su acidez brillante y su balance.
- Cerrado Mineiro (Brasil): primera DO brasileña de café. Granos con notas a cacao y nuez, cuerpo medio.
- Huehuetenango y Antigua (Guatemala): regiones con microclimas ideales y perfiles sensoriales marcadamente diferentes.
- Yirgacheffe (Etiopía): famosa por su perfil floral y cítrico, esta región tiene reconocimiento mundial incluso sin un sistema legal de DO formal.
- Blue Mountain (Jamaica): una de las más exclusivas. Perfil suave, dulce y extremadamente equilibrado.
¿Por qué es importante para el consumidor?
- Garantiza trazabilidad: sabés exactamente de dónde proviene tu café.
- Refleja calidad y autenticidad.
- Apoya el comercio justo y la sostenibilidad regional.
- Permite explorar perfiles únicos de sabor ligados a una región, como el floral de Yirgacheffe o el achocolatado de Tarrazú.
¿Y si un café no tiene DO?
No todos los buenos cafés tienen una DO certificada. Algunos pequeños productores elaboran cafés de calidad excepcional sin pertenecer a una denominación formal. Pero cuando la DO está presente y bien gestionada, es una excelente guía para elegir cafés con identidad y calidad asegurada.
