Las cápsulas reutilizables son una excelente opción, pero no están exentas de pequeños problemas técnicos que pueden afectar la experiencia. Afortunadamente, la mayoría tienen soluciones sencillas si se los identifica a tiempo.
🚫 1. El café sale aguado o sin cuerpo
Causa: molienda muy gruesa, poca cantidad de café o compactación débil.
Solución: usá una molienda más fina, agregá un poco más de café y compactá con más firmeza.
🚫 2. No sale nada de café o solo gotea
Causa: molienda muy fina o café demasiado compactado. También puede ser un filtro tapado.
Solución: ajustá a una molienda más aireada, presioná menos y revisá si el filtro está limpio.
🚫 3. La cápsula no encaja o se traba al cerrar
Causa: cápsula incompatible, exceso de café, tapa mal cerrada o máquina muy sensible.
Solución: verificá el modelo, usá menos café y asegurate de que la tapa esté completamente sellada. Nunca fuerces el cierre.
🚫 4. El café sale con sabor raro o metálico
Causa: mala limpieza, café viejo, residuos de detergente o material de baja calidad.
Solución: lavá bien la cápsula solo con agua tibia, cambiá el café por uno fresco y elegí cápsulas de marcas confiables.
🚫 5. No se forma crema
Causa: café inadecuado (origen, tueste o molienda), falta de presión o baja temperatura.
Solución: usá un blend que incluya robusta, ajustá molienda y compactación, y precalentá la máquina antes de usarla.
Conclusión:
La mayoría de los problemas se solucionan ajustando la molienda, la cantidad de café y el proceso de limpieza. Con observación y ajustes pequeños, es posible mejorar radicalmente los resultados y evitar frustraciones.