¿Por qué algunos blends mezclan arábica y robusta? ¿Y cuál es la proporción ideal?

Si sos observador, habrás notado que muchos cafés comerciales, especialmente los que se usan en espresso, no son 100% arábica, sino mezclas. Estos blends combinan lo mejor de cada especie para lograr un equilibrio buscado en sabor, textura y costo. Pero… ¿por qué se mezclan? ¿Y cómo saber cuál es la mejor proporción para vos?


1. ¿Por qué se mezclan arábica y robusta?

No es solo por abaratar costos. Las mezclas tienen razones técnicas y sensoriales:

  • El robusta aporta cuerpo, crema densa y cafeína.
  • El arábica aporta dulzor, acidez y aromas complejos.
  • En combinación, logran tazas más equilibradas, especialmente útiles en espresso y bebidas con leche.

2. Ventajas del blend

  • Mayor estabilidad: una mezcla bien diseñada es más consistente a lo largo del año.
  • Mejor textura: en espresso, el robusta genera una crema más firme y persistente.
  • Versatilidad: el blend se adapta bien a diferentes paladares y métodos de preparación.
  • Costo más accesible: sin sacrificar tanto la calidad sensorial.

3. ¿Cuál es la proporción ideal?

Depende del resultado que busques. Aquí van algunas combinaciones frecuentes y su perfil:

ProporciónPerfil sensorialRecomendado para
100% arábicaDulce, suave, ácido, complejoFiltrados, prensa, espresso gourmet
80% arábica / 20% robustaDulzor + cuerpo, crema equilibradaEspresso con carácter y balance
60% arábica / 40% robustaFuerte, con intensidad y estructuraCafé con leche, cortado, moka
50/50Amargo, potente, muy cafeinadoEspresso fuerte o paladares exigentes
100% robustaAmargo, terroso, astringenteCafé instantáneo, usos industriales

💡 Tip: Algunos tostadores no revelan su fórmula exacta, pero podés inferir la proporción por el sabor y la crema.


4. ¿Cómo saber si un blend está bien hecho?

Un buen blend no debe dejar que el robusta domine con amargor seco o aroma a caucho.
Tampoco debe anular la acidez y dulzor del arábica. Si en boca el café es redondo, con cuerpo, sin agresividad ni apagamiento, estás frente a una mezcla bien lograda.


Conclusión

Los blends no son una trampa ni un engaño. Son una herramienta más para crear el café perfecto para cada uso.
Aprender a leer y entender las proporciones de un blend te convierte en un consumidor más consciente, que elige lo que quiere tomar… no lo que le toca.