Si hay una marca que ha sabido llevar el nombre del cacao ecuatoriano a lo más alto del mundo, esa es Pacari. Fundada en 2002 por Santiago Peralta y Carla Barboto, esta empresa familiar revolucionó la industria del chocolate al apostar por una visión clara: calidad extrema, producción ética y un vínculo profundo con la tierra y las comunidades.
Un nombre con raíces ancestrales
“Pacari” significa “naturaleza” en quechua, y no es casual. Desde sus inicios, la marca se propuso trabajar de forma 100% orgánica y biodinámica, respetando los ritmos de la naturaleza, el entorno y a los agricultores que cultivan el cacao.
Cacao de origen único
Pacari fue una de las primeras marcas en desarrollar el concepto de “single origin” en Latinoamérica, es decir, chocolates elaborados exclusivamente con granos de una sola región. Esto permite resaltar el terroir y las características únicas del cacao de zonas como Esmeraldas, Los Ríos o Manabí.
Entre sus barras más emblemáticas están:
- Raw 70%: chocolate crudo sin tostar, con mayor concentración de antioxidantes.
- Andean Rose: chocolate infusionado con pétalos de rosa andina.
- Lemongrass, Guayusa, Maracuyá, entre otras combinaciones con ingredientes nativos.
- Piura Quemazón: una joya elaborada con un cacao blanco rarísimo del norte de Perú.
Premios internacionales
Pacari ha ganado más de 300 premios internacionales, incluyendo varias medallas en los International Chocolate Awards. Esto la convierte en una de las marcas más premiadas del mundo, y la primera de Sudamérica en alcanzar ese nivel de reconocimiento.
Más que comercio justo
Pacari va más allá del comercio justo. Trabaja con más de 4.000 familias de pequeños productores, eliminando intermediarios y generando un modelo económico más justo y participativo. Además, capacita a los agricultores y promueve el respeto por la biodiversidad local.
Sabor con conciencia
Cada tableta de Pacari no solo ofrece un perfil de sabor único y profundo, sino también la tranquilidad de saber que se está consumiendo un producto orgánico, vegano, sin gluten ni lácteos, y con impacto positivo.