Un bombón macizo puede ser una delicia por sí solo.
Pero cuando se combina con la bebida correcta, el resultado puede ser aún más memorable. El maridaje no se trata de “acompañar” con lo que tenés a mano, sino de encontrar armonías o contrastes que realcen lo mejor del chocolate.
Como en el vino o el queso, cada tipo de chocolate tiene sus notas, su intensidad, su textura. Y hay bebidas —desde vinos hasta infusiones— que pueden potenciar su sabor, equilibrarlo o llevarlo en direcciones nuevas.
A continuación, una guía práctica para maridar bombones macizos según su tipo de chocolate:
Chocolate amargo (más de 70 %)
Perfil: intenso, seco, con notas tostadas, amargas o frutales
Maridajes ideales:
- Vino tinto con cuerpo (Malbec, Syrah, Cabernet Sauvignon)
- Café espresso
- Whisky ahumado
- Cerveza negra tipo stout o porter
- Té negro fuerte (Assam, English Breakfast)
Consejo: evitá bebidas muy dulces que opaquen su profundidad. Este chocolate pide compañía con carácter.
Chocolate con leche
Perfil: más dulce, suave, cremoso, con notas lácteas y tostadas
Maridajes ideales:
- Vino dulce natural (Oporto, Marsala, Pedro Ximénez)
- Latte o cappuccino
- Licor de crema
- Ron añejo
- Té chai o rooibos especiado
Consejo: al tener dulzor, funciona muy bien con bebidas que sumen especias o un punto de acidez para equilibrar.
Chocolate blanco
Perfil: muy dulce, mantecoso, con sabor a leche y vainilla
Maridajes ideales:
- Espumantes (champagne, prosecco, cava)
- Té verde (matcha, sencha)
- Gin tonic floral
- Cerveza de trigo
- Infusiones frutales o cítricas
Consejo: el chocolate blanco gana mucho cuando se combina con burbujas, acidez o frescura. No lo empalagues más: buscá contraste.
Bombones macizos con inclusiones (frutas secas, especias, sal marina)
Perfil: varía según el agregado: puede ser crocante, salado, picante
Maridajes ideales:
- Vinos blancos secos o espumantes brut
- Vermut rosso o aperitivos frutales
- Té oolong
- Amargos (fernet, campari)
- Infusión de hierbas con menta o jengibre
Consejo: elegí bebidas que acompañen ese contraste de texturas y sabores, sin competir.
¿Cómo hacer el maridaje perfecto en casa?
No hace falta una cata profesional. Podés probar con lo que tengas a mano, pero prestá atención a lo que pasa en boca. ¿El bombón tapa la bebida? ¿La bebida arrastra el sabor del chocolate? ¿Se complementan o se pelean?
El maridaje correcto no borra sabores, los amplifica. Si después de morder el bombón y tomar un sorbo sentís que todo brilla más, que hay algo nuevo… entonces hiciste el maridaje correcto.
El bombón macizo es una pieza noble. Y cuando lo acompañás con la bebida adecuada, se convierte en algo más que un dulce: se transforma en una experiencia.