Cuando comprás un café blend —por ejemplo 70% arábica / 30% robusta— lo lógico sería pensar que cada taza tendrá esa proporción exacta.
Pero en la práctica, muchas veces no es así, y eso puede afectar la experiencia de forma notable. Hoy vamos a hablar de un tema poco explorado: la distribución desigual de granos en blends mal integrados.
1. ¿Por qué ocurre este problema?
- En muchos casos, los granos de arábica y robusta se tuestan por separado y se mezclan al final. Si no se mezclan bien, pueden quedar «zonas» con más de un tipo que del otro.
- Además, como los granos de arábica y robusta difieren en tamaño, peso y densidad, pueden separarse dentro de la bolsa durante el transporte o almacenamiento.
- Esto significa que podés preparar un café con más robusta en una taza y más arábica en la siguiente, aunque ambas vengan de la misma bolsa.
2. ¿Qué consecuencias tiene en la taza?
- Inconsistencia en sabor, cuerpo y crema.
- Tazas impredecibles: una puede ser dulce y suave, y otra amarga y densa.
- Dificulta la calibración de espresso, especialmente si buscás regular molienda y tiempos en función del sabor.
3. ¿Cómo evitarlo?
✅ Comprar blends bien formulados:
- Tostadores serios utilizan mezcladoras industriales o técnicas de premezcla antes del tueste para asegurar homogeneidad.
- Algunos tuestan el blend juntos (si el tueste lo permite) para mayor integración.
✅ Fijarse en el aspecto visual:
- Si abrís una bolsa y ves granos muy distintos entre sí (forma, color, tamaño), probablemente el mezclado fue poco uniforme.
✅ Revolver el café antes de usar:
- Puede sonar simple, pero mezclar manualmente el contenido de la bolsa antes de dosificar ayuda a reducir la segregación por peso.
4. ¿Entonces los blends no sirven?
No necesariamente. Pero un blend mal mezclado es como una ensalada sin revolver: los ingredientes están ahí, pero no se combinan correctamente.
Un buen blend debe comportarse de forma coherente taza tras taza. Si eso no ocurre, se pierde la razón de mezclar en primer lugar.
Conclusión
El problema de los blends no está en la mezcla, sino en cómo se ejecuta esa mezcla. Si notás cambios bruscos de sabor en cada preparación, podría deberse a una distribución desigual de los granos.
Como consumidor informado, prestar atención a estos detalles te ayuda a elegir mejor y exigir más calidad.