Una cata de chocolate es una experiencia sensorial única, y cuando se realiza con monedas de chocolate, el resultado es aún más preciso y placentero. Este formato permite evaluar sabores, aromas, texturas y maridajes de forma controlada y elegante. En este artículo, te mostramos cómo organizar una cata guiada, ya sea en casa, en un evento o en una clase especializada.
¿Por qué elegir monedas para una cata?
- Tamaño ideal para la degustación individual.
- Textura controlada y espesor uniforme.
- Presentación limpia y profesional.
- Facilidad para combinar con bebidas o toppings sin cortar ni manipular.
1. Preparación previa
Selección del chocolate
Elegí entre 4 y 6 variedades de monedas, asegurándote de incluir:
- Diferentes porcentajes de cacao (ej. 40 %, 60 %, 70 %, 85 %)
- Distintos orígenes geográficos (ej. Ecuador, Madagascar, Venezuela, Perú)
- Variedades como con leche, blanco o infusionado (naranja, café, menta)
Consejo: usá chocolates bean-to-bar si buscás una experiencia más rica y con trazabilidad.
Selección de bebidas
Ofrecé bebidas que mariden bien con el chocolate:
- Vinos tintos (Malbec, Syrah)
- Vinos dulces o fortificados (Oporto, Mistela, Moscato)
- Espumantes o champán
- Té negro, té verde o rooibos
- Café espresso o filtrado
- Leche o bebidas vegetales para opciones suaves
2. Disposición del espacio
- Usá platos blancos o tablas para presentar las monedas.
- Numerá cada muestra para evitar confusión.
- Colocá las bebidas en vasos o copas individuales.
- Disponé servilletas neutras, agua y pan para limpiar el paladar entre muestras.
- Proveé fichas de cata o papel y lápiz para que los participantes tomen nota.
3. Guía paso a paso de la cata
- Observación visual: forma, color, brillo.
- Olfato: oler la moneda antes de llevarla a la boca. Identificar notas como frutos secos, madera, frutas, vainilla, etc.
- Textura: colocá la moneda en la lengua y dejá que se derrita. No la mastiques de inmediato.
- Sabor primario: identificá el sabor dominante (dulce, amargo, ácido).
- Retrogusto: apreciá lo que queda después de tragar.
- Maridaje: probá la bebida elegida y volvé a degustar el chocolate.
Tip: podés dar ejemplos de qué buscar (“¿sentís notas florales?”, “¿te recuerda a alguna fruta?”).
4. Actividades opcionales
- Ronda de discusión: cada participante cuenta su experiencia con un chocolate específico.
- Puntuar y votar: cuál fue el mejor maridaje de la noche.
- Cierre con fondue o trufas: para terminar con una experiencia más relajada.
5. Público ideal y ocasión
- Reuniones de amantes del chocolate
- Talleres gastronómicos
- Parejas o grupos de amigos
- Actividades para eventos corporativos o en tiendas especializadas
Podés adaptar la cata según el público, agregando más o menos tecnicismo.
Conclusión
Una cata con monedas de chocolate y bebidas bien seleccionadas transforma una simple degustación en un evento memorable. Es una oportunidad para educar el paladar, descubrir nuevos sabores y compartir el placer del chocolate de manera guiada y sensorial. Lo mejor: ¡con cada moneda, una historia distinta!
