El Cold Brew Tonic es una bebida moderna que se ha vuelto popular en cafeterías de especialidad por su equilibrio entre amargor, dulzor y efervescencia. Perfecta para tardes calurosas, esta receta combina café frío por infusión lenta con agua tónica, dando como resultado una experiencia chispeante, elegante y con carácter.
Ingredientes:
- 100 ml de cold brew concentrado (idealmente reposado entre 12 y 16 horas)
- 150 ml de agua tónica premium
- Hielo en cubos
- Rodaja de limón o naranja (opcional, para decorar)
- Hojas de romero o menta (opcional, para un toque herbal)
Preparación:
- Llená un vaso largo con hielo hasta el tope.
- Verté lentamente el agua tónica sobre el hielo. Es importante hacerlo primero para conservar la efervescencia.
- Luego, con cuidado y suavemente, agregá el cold brew. Si lo hacés despacio, verás cómo se forma una capa visualmente atractiva antes de mezclarse.
- Decorá con una rodaja fina de limón o naranja. Si deseás, añadí una ramita de romero o menta para realzar los aromas.
- No revolvés de inmediato: dejá que el bebedor lo mezcle a su gusto.
Tip: Para un toque más sofisticado, usá agua tónica con botánicos o sabor a yuzu o pepino. El resultado es sorprendentemente complejo y refrescante.
Esta receta eleva el cold brew a otro nivel, ideal para sorprender a invitados o como aperitivo sin alcohol.