Cuando se piensa en chocolate de origen, India no suele ser el primer país que viene a la mente. Sin embargo, en la última década, surgieron emprendimientos que están cambiando esa percepción. Uno de los más interesantes es ChocoMonk, una marca independiente que trabaja desde el sur de India con cacao local y filosofía artesanal.
Un proyecto nacido del cacao indio
Fundada en Karnataka, ChocoMonk comenzó como un pequeño taller impulsado por jóvenes emprendedores y amantes del cacao que buscaban valorizar el cultivo local. En lugar de importar granos o replicar fórmulas extranjeras, decidieron hacer chocolate con identidad india, desde el grano hasta la tableta.
Cacao de origen: un tesoro inesperado
India tiene plantaciones de cacao en regiones como Kerala, Andhra Pradesh y Tamil Nadu. Aunque no tan conocidos como los de Ecuador o Ghana, estos granos tienen perfiles aromáticos únicos, gracias a los suelos, microclimas y especies autóctonas cultivadas en sistemas agroforestales.
ChocoMonk trabaja directamente con pequeños agricultores, paga precios justos y colabora en la fermentación y secado para mejorar la calidad. El resultado: un chocolate que sorprende por su carácter y autenticidad.
Productos con alma local
La propuesta de ChocoMonk combina tradición chocolatera con sabores típicos de la India. Entre sus variedades más populares:
- Chocolate negro con masala chai
- Chocolate con leche y cardamomo
- Tabletas infusionadas con azafrán y pistacho
- Ediciones limitadas con mango deshidratado, cúrcuma o tamarindo
Además, ofrecen una línea sin azúcar añadido, una colección de bombones y chocolates veganos.
Producción ética y artesanal
ChocoMonk se identifica como microproductor Bean to Bar. Su producción es limitada, hecha a mano, y cada lote está numerado. Usan envoltorios biodegradables y trabajan con energía solar para parte del proceso de templado y empaquetado.
Reconocimiento creciente
Aunque aún es una marca de nicho, ChocoMonk ha ganado premios regionales y ha sido destacada en ferias de chocolate como Chocoa Amsterdam y Cacao of Excellence India. También ha comenzado a exportar a Europa en pequeñas cantidades, apostando por el crecimiento sin perder autenticidad.