Si pensabas que el café y la soda no combinaban, esta receta te va a hacer cambiar de idea. Esta bebida se siente como un refresco burbujeante, pero con el toque profundo del café. Es ideal para días calurosos, y su preparación no puede ser más simple.
Ingredientes:
- ½ taza de café frío (espresso o filtrado fuerte)
- ½ taza de soda o agua con gas bien fría
- Hielo en cubos
- Rodaja de limón o naranja (opcional)
Preparación:
- Llená un vaso con hielo hasta el tope.
- Verté el café frío sobre el hielo.
- Añadí lentamente la soda fría para mantener la efervescencia.
- Mezclá suavemente con una cucharita.
- Opcional: decorá con una rodaja fina de cítrico para un aroma extra fresco.
Tip: Si querés un toque más dulce, podés agregar un chorrito de almíbar simple (azúcar + agua) o unas gotas de esencia de vainilla antes de añadir la soda.
Esta bebida es tan ligera como un agua saborizada, pero con el carácter único del café.