Café con leche clásico – La taza perfecta en casa

Aunque parezca simple, un buen café con leche tiene su ciencia. No se trata solo de mezclar café y leche: el equilibrio, la temperatura y la textura hacen la diferencia. Esta receta es ideal para quienes buscan una bebida suave, reconfortante y con todo el sabor del café, sin necesidad de máquinas sofisticadas.

Ingredientes:

  • ½ taza de café recién hecho (espresso, filtrado o instantáneo fuerte)
  • ½ taza de leche (entera, descremada o vegetal)
  • Azúcar o endulzante al gusto (opcional)

Preparación:

  1. Calentá la leche en una ollita o en el microondas hasta que esté bien caliente, pero sin que hierva.
  2. Si querés una textura más cremosa, batí unos segundos la leche caliente con un batidor de mano o espumador (opcional).
  3. Serví el café en una taza grande y agregá lentamente la leche caliente.
  4. Endulzá a gusto y revolvé suavemente.

Tip: Para un sabor más intenso, usá café con cuerpo (como espresso doble o V60 fuerte). Para una versión más suave, invertí la proporción: ⅓ café y ⅔ leche.

Este café con leche es perfecto para el desayuno o una merienda clásica, fácil y reconfortante.