En la preparación con AeroPress, mucho se habla de la molienda, la temperatura y el tiempo de infusión. Pero hay un paso final que muchos descuidan: el tiempo que tardás en presionar el émbolo. Este gesto, aparentemente simple, afecta directamente la extracción final, el cuerpo del café y su equilibrio.
¿Qué es el tiempo de prensado?
Es el período que va desde que empezás a empujar el émbolo hasta que el aire expulsa el último chorrito de café. En general, puede variar entre 15 y 60 segundos, dependiendo de tu fuerza, el tipo de molienda y el filtro.
¿Qué ocurre si prensás demasiado rápido?
- Menos extracción final. El agua pasa demasiado rápido, y se pierden compuestos solubles del café.
- Mayor riesgo de salpicaduras y de forzar la goma del émbolo.
- El café puede resultar ácido, débil o subextraído.
¿Y si prensás muy lento o con excesiva fuerza?
- Podés sobreextraer compuestos amargos si usaste molienda fina o tiempo largo de infusión.
- Se incrementa el riesgo de amargor y astringencia.
- El esfuerzo excesivo también puede dañar la goma del émbolo con el tiempo.
Recomendación general del profesor:
- Apuntá a un prensado suave y constante de entre 20 y 30 segundos.
- No fuerces. Si necesitás mucha presión, probablemente la molienda esté demasiado fina.
- Escuchá el «silbido» de aire que indica que el agua ya salió: no sigas presionando después de ese sonido, para evitar extraer partículas residuales no deseadas.
Consejo extra: el prensado es parte de la receta
Así como controlás el tiempo de infusión o la temperatura, anotá cuánto tiempo tardás en presionar y cómo eso cambia el sabor. Si un café te sale demasiado fuerte o amargo, quizá no necesitás cambiar todo… solo presionar un poco más rápido o más lento.