No todos los granos se comportan igual. El tipo de café que elijas –ya sea por su origen, método de procesamiento o nivel de tueste– influye directamente en cómo deberías prepararlo con AeroPress. Comprender esto es clave para sacar lo mejor de cada grano y evitar sabores apagados o desequilibrados.
☕ 1. Origen y densidad del grano
Los granos de altura (como los etíopes o colombianos) son más densos y requieren más energía para extraer sus sabores. Podés usar agua más caliente (90-94 °C) y tiempos un poco más largos. En cambio, cafés de zonas más bajas (como Brasil o India) pueden extraerse bien con menos temperatura.
🍓 2. Proceso natural vs. lavado
- Naturales (secados con la pulpa): tienden a ser más dulces y frutales, pero también más sensibles a la sobreextracción. Usá menos agitación, molienda un poco más gruesa y quizás menos tiempo.
- Lavados (fermentados y enjuagados): tienen más claridad y acidez. Aceptan más agitación y mayor temperatura sin sobreextraerse.
🔥 3. Tostado claro, medio u oscuro
- Tostados claros: requieren mayor temperatura y tiempo de contacto para liberar bien sus notas. Se recomienda también agitación controlada.
- Tostados oscuros: ya han desarrollado sabores intensos. Usá agua más tibia (80-85 °C), molienda más gruesa y extracciones rápidas para evitar amargor o astringencia.
🧪 4. Ejemplo de ajuste práctico
Si estás usando un café etíope, natural, tostado claro:
- Molienda: media-fina
- Agua: 91 °C
- Tiempo total: 2:15 min
- Agitación: muy suave
- Resultado: taza limpia, con notas florales y acidez brillante
En cambio, si usás un café brasileño, lavado, tostado medio:
- Molienda: media
- Agua: 86 °C
- Tiempo: 1:30 min
- Agitación: normal
- Resultado: cuerpo medio, sabor achocolatado
Consejo antes de preparar, preguntate: ¿qué perfil tiene mi café? Con práctica, vas a poder ajustar automáticamente según su comportamiento, logrando tazas balanceadas cada vez que cambies de origen o tostado.